Sindicatos y empresarios se disponen a sellar el pacto salarial el próximo lunes. (EL PAIS)

Sindicatos y empresarios se disponen a sellar el pacto salarial el próximo lunes. (EL PAIS)

Todo está listo para que el lunes los sindicatos UGT y CC OO, y las patronales CEOE y Cepyme cierren el acuerdo de negociación salarial, según figura en un documento que una de las centrales ha enviado a su organización y al que ha tenido acceso EL PAÍS. Las cifras generales sobre la subida de los sueldos ya están cerradas: un alza anual del 2% hasta 2020, más otro 1% según beneficios, productividad o absentismo y una mejora para los más bajos hasta llegar a los 14.000 euros anuales. La redacción definitiva aún no está cerrada y faltan detalles por definir. Pero los negociadores no creen que esos flecos hagan descarrilar el pacto.

Las declaraciones públicas rebosan optimismo. El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha declarado más de una vez en las últimas jornadas que el pacto es "inminente". Ambas centrales desconvocaron las manifestaciones previstas para el pasado sábado por los avances en la negociación. Y las señales que llegan desde todos los agentes sociales apuntan a que el lunes se sellará un principio de acuerdo con las recomendaciones del IV Acuerdo Estatal de Negociación Colectiva (AENC) que marcarán la firma de convenios colectivos entre 2018 y 2020. Entre esas señales está, por ejemplo, el preacuerdo al que llegó el sector químico el miércoles con un incremento anual de sueldos del 2,5% hasta 2021. Ese convenio, que afecta a casi 300.000 trabajadores, esperaba desde hace tiempo que se desatascaran las conversaciones confederales.

En este contexto, los agentes sociales se preparan para sellar el acuerdo el próximo lunes. Así se desprende del documento que uno de los sindicatos ha enviado a toda su organización. En esta circular, la central informa del contenido del preacuerdo que esperan cerrar. Casi todas las fuentes mantienen la cautela, advierte que no todo está cerrado y apuntan a “flecos pendientes”. A pesar de ello, todos los consultados están seguros de que el lunes por la tarde se zanjará el acuerdo para bien.

 

El contenido del pacto recogerá previsiblemente una subida de sueldos de “en torno al 2%”. Esa expresión, “en torno”, ha sido un elemento clave para que los sindicatos acepten rebajar sustancialmente sus pretensiones iniciales, que se situaban en el 3,1% más otro porcentaje adicional. Ni UGT ni CC OO aceptaban que la redacción del acuerdo fuera como la de la edición anterior, cuando el texto decía “hasta un”. Al 2% inicial, la recomendación pactada —el AENC es un acuerdo guía con recomendaciones a los negociadores de convenios— añadirá un variable del 1% a cuantificar según la marcha de la productividad, el absentismo injustificado y los resultados empresariales.

Otro elemento sustancial es que recogerá el objetivo de llegar a 2020 con un salario mínimo de 14.000 euros al año (1.000 euros mensuales incluyendo pagas extras). Para ambas centrales, una subida mayor de los sueldos más bajos, los que más han sufrido la devaluación salarial en la crisis, era una línea roja a la que no están dispuestos a renunciar.

Rebajar el absentismo

Además, está previsto que el acuerdo recoja recomendaciones sobre lo que sucede con los convenios cuando caducan. Antes de la reforma laboral se prorrogaban automática e indefinidamente (ultraactividad) hasta que se pactaba uno nuevo. Tras la reforma, esta prórroga se redujo al año. Posteriores sentencias y el anterior AENC matizaron esto y, ahora, volverá se redactará previsiblemente así: “Las partes firmantes comparten la necesidad de que durante el periodo de negociación de los convenios estos conserven su vigencia”.

Un elemento que distinguirá este acuerdo de otros es que tendrá una parte que expondrá temas que deberán desarrollarse con el Gobierno en los próximos meses para materializarse en cambios legales. Hay cuatro puntos que patronales y sindicatos negociarán con el Ministerio de Trabajo: la modificación del artículo del Estatuto de los Trabajadores que regula la subcontratación para garantizar que en las externalizaciones no se deterioren las condiciones de trabajo; un modelo de ajustes laborales basado en regulaciones de empleo temporales o reducciones de jornada que vayan acompañadas de una prestación que compense la pérdida de sueldo; negociaciones para llegar a un nuevo modelo de formación continua; y la creación de observatorio que proponga cómo reducir el absentismo.

Toda la informacion en el siguiente enlace de EL PAIS:

https://elpais.com/economia/2018/06/21/actualidad/1529607944_043994.html