El 60% de los pacientes sufren tiempos de espera excesivos en la sanidad regional

Las demoras para una intervención quirúrgica se reducen, pero aumentan para una primera consulta con el médico especialista

De cada diez pacientes en lista de espera para una operación o para una consulta con el especialista, seis sufren demoras excesivas. Así se desprende de los datos publicados ayer por el Servicio Murciano de Salud (SMS), que reflejan una paulatina reducción de los tiempos de espera para cirugías, pero también un aumento de los retrasos que sufren quienes aguardan a ser atendidos por un médico especialista.

En concreto, la espera media para entrar al quirófano se sitúa, a cierre de 2016, en 100,9 días, 8,3 menos que en 2015. La mejora es sustancial con respecto a los años de recortes, cuando se llegaron a alcanzar los 122 días. Sin embargo, los malos resultados en consultas externas, con un aumento de 11 días (de 61 a 72 días de espera media), reflejan que el problema de las demoras sigue muy lejos de estar resuelto en la sanidad regional.

De los 106.060 pacientes que a 31 de diciembre estaban en alguna lista de espera quirúrgica o de consultas externas, nada menos que 63.767 superaban los tiempos máximos fijados como tolerables por la propia Consejería en un decreto que la realidad hace años que convirtió en papel mojado. Así, 56.936 personas llevaban, a 31 de diciembre, más de 50 días a la cola para una primera consulta con el especialista. Esto significa que el 71% de quienes aguardaban turno superaban el tiempo de espera establecido como máximo. Es un empeoramiento muy notable, con 20.000 pacientes más que en 2015 por encima de los tiempos considerados como límite admisible. En el caso de los quirófanos, el 25% de los pacientes en lista de espera (6.831 de 26.710) llevaban a finales de año más de 150 días aguardando.

El director gerente del SMS, Francisco Agulló, puso el acento en la reducción de las esperas quirúrgicas. Con respecto al año anterior, el número de personas que superan los 150 días de espera ha disminuido un 11%. También hay menos gente con demoras por encima del año. 282 pacientes superaban a finales de 2015 los 365 días de espera, frente a los 182 que se encontraban en esta situación al cierre de 2016. El plan de choque puesto en marcha por el SMS ha permitido también reducir de 203 a 161 el número de pacientes de prioridad 1 (casos graves programados) que sufren esperas superiores al mes.

Agulló destacó que la actividad quirúrgica ha aumentado en jornada ordinaria, «lo que evidencia una mayor optimización de los recursos». La mejoría en la lista de espera quirúrgica se explica sobre todo por los descensos de las demoras en las dos principales especialidades: Cirugía General, donde se ha pasado de una espera media de 110 días a 89, y Traumatología (de 131 días a 109). Por el contrario, los tiempos empeoran en Neurocirugía (de 96 días de espera media a 118), Ginecología (de 76 a 100) y, muy especialmente, en Cirugía Cardíaca, con 65 días más de demora en 2016 con respecto a 2015.

Pero las cifras más negativas son las relativas a consultas externas. Los 72 días de espera media, 11 más que el año anterior, representan «un dato no favorable», admitió Francisco Agulló. Para el paciente, el camino al quirófano empieza con la derivación del médico de familia al especialista, quien prescribe las pruebas complementarias necesarias e incluye finalmente al enfermo en la lista quirúrgica. Es decir, para valorar la espera que sufre el usuario hay que tener en cuenta la suma de las demoras en cada uno de los escalones del sistema sanitario. La primera consulta con el especialista es clave en este proceso, y en muchos casos se convierte en un auténtico tapón. Demoras de 101 días de media en Neurología, 107 en Traumatología o 69 en Ginecología terminan por eternizar el proceso.

Por ejemplo, un paciente de Cardiología tarda 52 días de media en ser visto por el especialista. Si necesita un ecocardiograma hay que sumar otros 20 días de promedio. El paso final para entrar al quirófano se alarga durante otros 143 días. Todo eso sin tener en cuenta segundas consultas y otras posibles pruebas.

El SMS destaca que el volumen de consultas con el especialista es enorme: casi 2,5 millones en 2016, de las cuales cerca de 815.000 se corresponden con una primera visita. Sanidad también subraya que se ha reducido el número de pacientes que sufren demoras de entre 60 y 90 días.

Con respecto a las pruebas diagnósticas, la espera media se sitúa en 24,8 días, una cifra prácticamente idéntica a la de 2015. Sin embargo, este indicador es poco fiable: de las 36.947 personas en lista de espera a 31 de diciembre, 33.523 no tenían aún fecha asignada.

Fuente: http://www.laverdad.es/